jueves, 3 de agosto de 2017

Día 44 - 100 Días de Favor (Joseph Prince)

Aceptemos el hecho que Jesús nos perdonó mucho y que todos nuestros pecados presentes, pasados y futuros ya fueron borrados.


Día 44
Mucho te fue perdonado

Versículo de Hoy
Por lo cual te digo que sus muchos pecados le son perdonados, porque amó mucho; mas aquel a quien se le perdona poco, poco ama.
- Lucas 7:47

Vamos a leer Lucas 7: 36-50 con atención para ver lo que Jesús dijo sobre el perdón de los pecados. Simón, el fariseo, había invitado a Jesús a su casa. Mientras Jesús estaba sentado a la mesa en la casa de Simón, una mujer se acercó a Él. Ella empezó a llorar y lavó los pies de él con sus lágrimas. Después secó los pies de Jesús con sus cabellos, los besó y los ungió con aceite perfumado.

Tú sólo amarás a Jesús intensamente cuando experimentes Su gracia abundante y su favor inmerecido para perdonarte por todos tus pecados; pasados, presentes y futuros.

Cuando Simón vio esto, él se dijo a sí mismo: "Si este hombre fuera profeta, sabría quién y qué tipo de mujer es ésta que lo está tocando, pues es una pecadora." Aunque Simón no había hablado en voz alta, es interesante el hecho de que Jesús le respondió haciendo la siguiente pregunta: "Ciertamente un acreedor tenía dos deudores: uno le debía quinientos denarios, y el otro, cincuenta. No teniendo ninguno de los dos con qué pagar, perdonó a ambos. ¿Cuál de ellos, por lo tanto lo amará más?" Respondió Simón: "Supongo que aquel a quien más perdonó." Entonces Jesús le dijo: "Juzgaste bien." Luego, volviéndose a la mujer, Jesús le dijo a Simón: "¿Ves esta mujer? Entré en tu casa, y no me diste agua para los pies; pero ésta regó mis pies con lágrimas y los secó con sus cabellos. No me dejo este beso; Sin embargo, desde que entré no cesa de besarme los pies. No me ungiste la cabeza con aceite, pero esta, con bálsamo, ungió mis pies. Por eso te digo: perdonados le son sus muchos pecados, porque ella amó mucho; Pero aquel a quien poco se perdona, poco ama."

La mujer amó mucho a Jesús porque sabia que había sido perdonada mucho. En realidad, nadie ha sido perdonado poco. Todos hemos sido perdonados mucho. Y aquella mujer lo sabía. Así que lo que es más "peligroso" acerca de esta doctrina del perdón completo de los pecados es que te enamoras de Jesús y acabas cumpliendo sin esfuerzo el mandamiento más grande: "Amarás al Señor, tu Dios, de todo tu corazón, de toda tu alma y con todo tu entendimiento" (Mateo 22: 36-38). ¡Aleluya!

Si encuentras que fuiste poco perdonado, entonces amarás poco. Pero cuando sepas cuánto has sido perdonado, ¡amarás a Jesús mucho! ¡Saber cuánto fue perdonado es el secreto para amar a Jesús! En otras palabras, sólo amarás a Jesús intensamente cuando experimentes Su gracia abundante y su favor inmerecido para perdonarte por todos tus pecados; pasados, presentes y futuros. Pero su gracia es barateada cuando piensas que Él sólo te perdonó por los pecados que cometiste hasta el momento en que fuiste salvo, y después de ese punto, necesitas depender de tu confesión de pecados para ser perdonado.

El perdón de Dios no se da por cuotas. No camines por ahí pensando que cuando confiesas un pecado, Él te perdona sólo por ese pecado. Entonces, la próxima vez que peques, necesitarás confesar tu pecado de nuevo para que Él te perdone de nuevo. Este es el tipo de creencia que abarata la gracia de Dios. Y el resultado de esto es que por pensar que Él te perdonó poco, acabas amándole poco, y te privas de correr hacia Él y verlo ayudarte, liberarte y hacerte prosperar.

Amado, con un sacrificio en la cruz, Jesús borró todos los pecados de toda tu vida. No banalices su favor inmerecido con tus esfuerzos imperfectos de confesar todos tus pecados. ¡Reconoce ese regalo que Jesús te dio y dale el valor que se merece recibiéndolo completamente y experimentando su favor inmerecido hoy!

Oración de hoy
Padre, te doy gracias porque he sido perdonado mucho. De hecho, todos mis pecados de toda mi vida fueron perdonados, borrados de una vez por todas por la sangre eterna de Jesús. Por lo tanto, hoy, ¡espero recibir tu favor inmerecido y todas las cosas buenas que Tú has puesto en mi camino!

Pensamiento de hoy
Saber cuánto he sido perdonado es el secreto para amar a Jesús intensamente.


No hay comentarios:

Publicar un comentario