sábado, 25 de julio de 2015

¿Confesión de Pecados? - Segunda Parte


1 Juan 1:3-4 
3 lo que hemos visto y oído, eso os anunciamos, para que también vosotros tengáis comunión con nosotros; y nuestra comunión verdaderamente es con el Padre, y con su Hijo Jesucristo. 
4 Estas cosas os escribimos, para que vuestro gozo sea cumplido.

La Traducción de Martin Nieto pone así el versículo 3: "Eso que hemos visto y oído, os lo anunciamos para que  estéis unidos con nosotros, como lo estamos nosotros con el Padre y con su Hijo Jesucristo." 

Es evidente que Juan le está hablando a no creyentes, ya que les está invitando a estar unido con ellos, y les dice que la unión que tenían era con el Padre y el Hijo.

Los gnósticos creían que el Dios (padre y madre) era tinieblas y que el Hijo era luz. Y que los hombres estaban en tinieblas y la salvación la adquirían por medio de un conocimiento oculto.

Sigamos leyendo el pasaje para ir aclarando:

1 Juan 1:5-7 
5 Este es el mensaje que hemos oído de él, y os anunciamos: Dios es luz, y no hay ningunas tinieblas en él. 
6 Si decimos que tenemos comunión con él, y andamos en tinieblas, mentimos, y no practicamos la verdad; 
7 pero si andamos en luz, como él está en luz, tenemos comunión unos con otros, y la sangre de Jesucristo su Hijo nos limpia de todo pecado. 

Dios no es tinieblas, Dios es luz, y al andar en unión con Él por medio de la fe en Jesucristo es que tenemos la vida eterna.


2 Corintios 4:6 
6 Porque Dios, que mandó que de las tinieblas resplandeciese la luz, es el que resplandeció en nuestros corazones, para iluminación del conocimiento de la gloria de Dios en la faz de Jesucristo.

Dios no es tinieblas, Dios es luz, y el mandó que de las tinieblas resplandeciese la luz.

Los gnósticos tenían una percepción errónea de lo que era la luz y las tinieblas.

Ellos creían que mientras vivían en este mundo ellos vivían en tinieblas mientras iban adquiriendo el conocimiento secreto que les daría la salvación.

Juan les dice que no pueden comunión con Dios si es que estan caminando en las tinieblas, uno decide si caminar en la luz o en las tinieblas.

2 Corintios 6:14 
14 No os unáis en yugo desigual con los incrédulos; porque ¿qué compañerismo tiene la justicia con la injusticia? ¿Y qué comunión la luz con las tinieblas? 

Efesios 5:8 
8 Porque en otro tiempo erais tinieblas, mas ahora sois luz en el Señor; andad como hijos de luz.

De estos pasajes podemos ver que el incrédulo es el que camina en tinieblas y el creyente camina en la luz.

Entonces estos gnósticos docetistas aunque formaban parte de la congregación aún no eran salvos ya que ellos según decían andaban en tinieblas mientras iban adquiriendo el conocimiento que les traería la salvación.

En 1 Juan 2:19 Juan habla directamente de estas personas: "Salieron de nosotros, pero no eran de nosotros; porque si hubiesen sido de nosotros, habrían permanecido con nosotros; pero salieron para que se manifestase que no todos son de nosotros."

Ellos habían estado con la iglesia pero no eran parte de ella, sus creencias les impedían nacer de nuevo ya que ellos negaban dos cosas importantes, la humanidad de Jesucristo (lo cual ya hemos visto) y la existencia del pecado.

Ellos no estaban en comunión ni unidad con los creyentes porque los creyentes somos luz y los incrédulos tinieblas; y la luz no tiene comunión con las tinieblas. 

Teniendo esto en mente veamos los siguientes pasajes de 1 Juan:

1 Juan 2:8-10
8 Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la verdad no está en nosotros.
9 Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad.
10 Si decimos que no hemos pecado, le hacemos a él mentiroso, y su palabra no está en nosotros.

Esta pasaje debemos de leerlo en contexto, el versículo 9 es como el interior de un sandwich de los versículos 8 y 10, en los que Juan enuncia otra doctrina gnóstica docetista, la no existencia del pecado.

Los docetistas razonaban diciendo que el espíritu; que era eternamente bueno, no podía ser manchado por lo que el cuerpo; que era eternamente malo, hiciera. ¿Qué se podía esperar de algo tan malo? Estaban resignados a aceptar que no existía manera de renovar la carne y que de todas maneras sus pecados no podían afectar al espíritu. Esta doctrina les permitió vivir como querían.

Al hacer esto negaban la eficacia de la cruz de Cristo en la cual el pagó el precio de nuestros pecado y nos trajo eterna redención.

En el verso 7 dice: "Pero si andamos en luz, como él está en luz, tenemos comunión unos con otros, y la sangre de Jesucristo su Hijo nos limpia de todo pecado."

Juan nos está diciendo que hay pecado y nos da la solución para el pecado, si andamos en luz como Él esta en luz la sangre de Jesucristo la que nos limpia de todo pecado. La pregunta es si ya estamos limpios, ¿que pecado confesar?

Pero veamos los versículos 8 y 10: 

"Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la verdad no está en nosotros."

Es algo totalmente obvio que todos tenemos pecado, no existe persona 100% perfecta, el único fue Jesucristo.

"Si decimos que no hemos pecado, le hacemos a él mentiroso, y su palabra no está en nosotros."

Otra cosa más, si decimos que no hemos pecado le hacemos a Dios mentiroso debido a que Él declaro que Jesucristo murio por los pecados de toda la humanidad; Él fue el cordero de Dios que quito el pecado del mundo.

Vemos que en estos pasajes está tratando con el problema docetista del pecado, y la conclusión lógica es que el versículo 9, que está en medio de esta idea general también se refiere a ellos.

Para entender la palabra confesión en este pasaje veamos cual es su significado:


La palabra confesión usada aquí es homologeo que según strongs significa: "Homologeo; de un compuesto de la base de homo y logos; asentir, i.e. pacto, reconocimiento:- profesar, prometer, confesar, declarar, hacer."

Veamos el versículo 9 en varias versiones:

Versión de Arcas y Fernández
Si, por el contrario, reconocemos nuestros pecados, Dios, que es fiel y justo, nos los perdonará y nos purificará de toda iniquidad. 

Biblia de Jerusalén
Si reconocemos nuestros pecados, fiel y justo es él para perdonarnos los pecados y purificarnos de toda injusticia.

Biblia en Lenguaje Sencillo
Pero si reconocemos ante Dios que hemos pecado, podemos confiar siempre en que él, que es justo, nos perdonará y nos limpiará de toda maldad.

Palabra de Dios para Todos
Pero si admitimos nuestros pecados, Dios nos perdonará. Él es fiel y justo para limpiarnos de toda maldad.

Biblia Kadosh
Si reconocemos nuestros pecados, entonces, puesto que El es digno de ser confiado y es justo, El nos perdonará, y nos purificará de toda maldad. 

New American Bible
Si reconocemos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados y limpiarnos de toda maldad.

Nueva Biblia Española
Si reconocemos nuestros pecados, Dios, que es fiel y justo, perdona nuestros pecados y, además, nos limpia de toda injusticia. 

Traducción en Lenguaje Actual
Pero si reconocemos ante Dios que hemos pecado, podemos estar seguros de que él, que es justo, nos perdonará y nos limpiará de toda maldad.

Tyndale
Si reconocemos nuestros pecados, él es fiel y justo, para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad.

Wycliff
Si reconocemos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonarnos y limpiarnos de toda impiedad.

Vemos en estas versiones que dice reconocer o admitir, ¿quien debía reconocer o admitir? Los gnósticos docetistas que decían que no había pecado.

Al admitir y reconocer que habían pecado le estaban abriendo la puerta a Dios para que sus pecados fueran perdonados y estuvieran limpios te toda impiedad.

Entonces 1 Juan 1:9 no es una pasaje dirigido a los creyentes, cuyos pecados son limpios por la sangre Jesucristo, sino un llamado a la conversión para los gnósticos docetistas.

Al leer el pasaje en contexto podemos ver lo que realmente nos está diciendo este pasaje. 

viernes, 24 de julio de 2015

¿Confesión de Pecados? - Primera Parte


1 Juan 1-10
1  Lo que era desde el principio, lo que hemos oído, lo que hemos visto con nuestros ojos, lo que hemos contemplado, y palparon nuestras manos tocante al Verbo de vida
2 (porque la vida fue manifestada, y la hemos visto, y testificamos, y os anunciamos la vida eterna, la cual estaba con el Padre, y se nos manifestó);
3 lo que hemos visto y oído, eso os anunciamos, para que también vosotros tengáis comunión con nosotros; y nuestra comunión verdaderamente es con el Padre, y con su Hijo Jesucristo.
4 Estas cosas os escribimos, para que vuestro gozo sea cumplido.
5 Este es el mensaje que hemos oído de él, y os anunciamos: Dios es luz, y no hay ningunas tinieblas en él.
6 Si decimos que tenemos comunión con él, y andamos en tinieblas, mentimos, y no practicamos la verdad;
7 pero si andamos en luz, como él está en luz, tenemos comunión unos con otros, y la sangre de Jesucristo su Hijo nos limpia de todo pecado.
8 Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la verdad no está en nosotros.
9 Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad.
10 Si decimos que no hemos pecado, le hacemos a él mentiroso, y su palabra no está en nosotros.


Para entender este capítulo y todo el libro de Juan debemos entender no solo el contexto de toda la Biblia sino también el contexto histórico de este libro.

Cuando conocí al Señor me enseñaron que debía ir a los pasajes bíblicos con las preguntas: ¿Quién? ¿Cuando? ¿Donde? ¿Por qué? ¿Qué? 

Más adelante aprendí la importancia del contexto en la lectura bíblica, no solo el contexto inmediato sino el de el libro donde se encuentra el versículo y toda la Biblia en conjunto. Además conocer el contexto gramatical, histórico, social, geográfico y otras cosas relacionadas con lo que leemos.

Si utilizáramos estas dos reglas apropiadamente nos sería muy fácil distinguir las verdades bíblicas y no tragarnos todas las doctrinas falsas y tradiciones de los hombres.

Me parece curioso que muchos ministros no le den importancia a esto y crean que no es necesario; el otro día un ministro me decía: "El contexto gramatical no existe porque la Biblia se escribió corrida, sin puntos ni comas." Yo le pregunté: "¿Y entonces porque usas Strong's y Vine's que son dos diccionarios bíblicos?"

Respondamos las preguntas antes de continuar:

¿Quién? El autor fue el Apóstol Juan.

¿Cuando? Alrededor del 95 DC.

¿Donde? Probablemente en Éfeso

¿Para quién? Es una Epístola Universal, no tiene un destinatario específico sino toda la iglesia y en el contexto vemos que también a la secta gnóstica de los docetistas.

¿Por qué? La secta gnóstica docetista se había infiltrado en la iglesia negando la humanidad de Cristo y además diciendo que no había pecado. 

¿Para qué? En esta Epístola Juan refuta y corrige las enseñanzas de esta secta, mostrando la humanidad (y divinidad) de Jesucristo y la falsedad de doctrinas como la que decían que no existía el pecado.

Viendo esto pasemos a los primeros versículos:

En los primeros cuatro versículos Juan trata con la doctrina docetista en cuanto a la humanidad de Jesucristo.

Los docetistas como toda secta gnóstica creían que la carne era mala y el espíritu era bueno, por ese motivo Jesucristo, siendo Dios no podía haber venido en carne.

La palabra docetista viene de la griega doka, que significa una aparición. Así que ellos decían que Jesús no había venido en carne, sino que fue un espíritu, y que la crucifixión en realidad no sucedió.

Juan dice: "...lo que hemos oído, lo que hemos visto con nuestros ojos, lo que hemos contemplado, y palparon nuestras manos...."

Aquí Juan, siendo un testigo presencial de la vida de Jesús les dice que el con su cuerpo físico había oído, visto y tocado a Jesús, que Jesús no fue un espíritu sino una persona viva que anduvo en esta tierra.

Juan nos habla claramente de esta doctrina:

1Juan 4:2-3 
2 En esto conoced el Espíritu de Dios:  Todo espíritu que confiesa que Jesucristo ha venido en carne,  es de Dios; 
3 y todo espíritu que no confiesa que Jesucristo ha venido en carne,  no es de Dios;  y este es el espíritu del anticristo,  el cual vosotros habéis oído que viene,  y que ahora ya está en el mundo. 

2 Juan 1:7 
7 Porque muchos engañadores han salido por el mundo,  que no confiesan que Jesucristo ha venido en carne.  Quien esto hace es el engañador y el anticristo. 

Estos gnósticos docetistas no reconocían que Jesús había venido en carne y vemos aquí como Juan los llama claramente como engañadores y como el espíritu del anticristo.

El peligro del gnosticismo era evidente. Éllos negaban la encarnación de Dios en el Hijo. Al hacerlo, negaban la verdadera eficacia de la expiación ya que, si Jesús no es Dios, Él no podría hacer expiación por toda la humanidad y nosotros estaríamos todavía perdidos en nuestros pecados.


Continuará







lunes, 20 de julio de 2015

La Gracia y el Pecado


Hace años una pastor amigo mío decía que no se debía predicar de la justicia de Dios (justificación) porque era darle licencia para pecar a la gente, y usaba el ejemplo de una hermana que se aprovechaba de esa verdad para vivir una vida licenciosa.

Lo curioso es que después de 30 años se utiliza ese mismo argumento para hablar del pecado y la gracia de Dios.

Dicen: "El enseñar de la gracia de Dios es darle a la gente licencia para pecar."

El mismo argumento se lo dijeron a Pablo, cuanto más a nosotros el día de hoy.

En Romanos 3:8 dijo: "¿Y por qué no decir (como se nos calumnia, y como algunos, cuya condenación es justa, afirman que nosotros decimos): Hagamos males para que vengan bienes?"

Como dice mi Pastor Jim Andrews: "La enseñanza de la gracia de Dios muestra lo que hay en el corazón del hombre."

Pero la verdad es que los cristianos no necesitan una licencia para pecar, en mis casi 36 años de creyente he visto que los creyentes pecan sin necesidad de ella. Lo he visto en toda clase de iglesias y denominaciones.

Pablo nos dice respecto a la gracia y el pecado en Romanos:

Romanos 6:1-2
1 ¿Qué, pues, diremos? ¿Perseveraremos en el pecado para que la gracia abunde?
2 En ninguna manera. Porque los que hemos muerto al pecado, ¿cómo viviremos aún en él?

La gracia de Dios siempre es abundante para nosotros pero eso no es una excusa para pecar; no podemos echarle la culpa a la gracia ni a ninguna otra doctrina bíblica de nuestras decisiones en la vida.

La gracia hace algo diferente en cuanto al pecado, todo lo contrario a una licencia:

Tito 2:11-14
11 Porque la gracia de Dios se ha manifestado para salvación a todos los hombres,
12 enseñándonos que, renunciando a la impiedad y a los deseos mundanos, vivamos en este siglo sobria, justa y piadosamente,
13 aguardando la esperanza bienaventurada y la manifestación gloriosa de nuestro gran Dios y Salvador Jesucristo,
14 quien se dio a sí mismo por nosotros para redimirnos de toda iniquidad y purificar para sí un pueblo propio, celoso de buenas obras.

La gracia nos enseña a renunciar al pecado y vivir de manera correcta en este mundo.

Así que no le estemos echando la culpa a la gracia del pecado porque lo que en realidad hace es darnos solución para el pecado.

jueves, 16 de julio de 2015

Fe y Gracia, Mano a Mano


Romanos 4:13-16
13 Porque no por la ley fue dada a Abraham o a su descendencia la promesa de que sería heredero del mundo, sino por la justicia de la fe.
14 Porque si los que son de la ley son los herederos, vana resulta la fe, y anulada la promesa.
15 Pues la ley produce ira; pero donde no hay ley, tampoco hay transgresión.
16 Por tanto, es por fe, para que sea por gracia, a fin de que la promesa sea firme para toda su descendencia; no solamente para la que es de la ley, sino también para la que es de la fe de Abraham, el cual es padre de todos nosotros.

Es sorprendente como la gente separa la fe y la gracia como si fueran dos grandes enemigos.

La fe y la gracia no están divorciadas, es por fe para que sea por gracia.

Cuando hablamos de la salvación vemos como trabajan juntas.

Efesios 2:8-9
8 Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios;
9 no por obras, para que nadie se gloríe.

Vemos aquí que tanto la gracia, como la salvación, como la fe, vienen de Dios.

La gracia es el amor de Dios sin límites hacia nosotros, es Su favor inmerecido.

La salvación viene de parte de Dios por la obra terminada de Jesucristo.

La fe viene por el oír la Palabra de Dios (Romanos 10:17).

Entonces vemos que la gracia y la fe van de la mano para recibir la salvación que viene de Dios.

Y nuevamente en Romanos 4:16: "Por tanto, es por fe, para que sea por gracia, a fin de que la promesa sea firme para toda su descendencia; no solamente para la que es de la ley, sino también para la que es de la fe de Abraham, el cual es padre de todos nosotros."






martes, 14 de julio de 2015

Amazing Grace cantada por Elvis Presley (Video, Historia y Letra)

Este himno, es esta ocasión cantada por Elvis Presley, muestra lo que hace la gracia de Dios en el hombre, cambia al más vil pecador en un hijo de Dios. 

Solo debemos creer en la obra terminada de Jesucristo para recibirla.


"Amazing Grace" (conocido en algunas regiones hispanohablantes como "Sublime gracia") es un himno cristiano escrito por el clérigo y poeta inglés John Newton (1725-1807) y publicado en 1779. 

La composición, una de las canciones más conocidas en los países de habla inglesa, transmite el mensaje cristiano de que el perdón y la redención es posible a pesar de los pecados cometidos por el ser humano y de que el alma puede salvarse de la desesperación mediante la gracia de Dios. 
Newton escribió la letra a partir de su experiencia personal. Educado sin ninguna convicción religiosa, a lo largo de su juventud vivió varias coincidencias y giros inesperados, muchos de ellos provocados por su recalcitrante insubordinación. Fue forzado a unirse a la Royal Navy y como marinero, participó en el mercado de esclavos. Durante una noche, una tormenta golpeó tan fuertemente su embarcación que, aterrorizado, imploró la ayuda de Dios, un momento que marca el comienzo de su conversión espiritual. Su carrera como tratante de esclavos duró algunos años más, hasta que abandonó la marina para estudiar teología.

Ordenado clerigo de la Iglesia de Inglaterra en 1764, Newton fue nombrado párroco de Olney (Buckinghamshire), donde comenzó a componer himnos junto al poeta William Cowper. 

"Amazing Grace" fue escrito para ilustrar un sermón en el día de Año Nuevo de 1773. No se sabe si había música para acompañar los versos, puesto que pudo ser recitado por los feligreses sin melodía. 



Fue impreso por primera vez en 1779 dentro de la colección de Himnos de Olney de Newton y Cowper. 

La letra ha sido adaptada a más de veinte melodías, si bien la más conocida y frecuente en la actualidad es la llamada "New Britain", que fue unida al poema en 1835.


Letra de Amazing Grace

Amazing grace, oh, how sweet the sound
That saved a wretch like me
I once was lost, but now I'm found
Was blind, but now I see

When we've been there ten thousand years
Bright shinning as the sun
We've no less days to sing God's praise
Then when, when we first begun

Through many dangers, toils and snares
I have already come
Twas grace that brought me safe thus far
And grace will lead me home

Amazing grace, oh, how sweet the sound
That saved a wretch like me
I once was lost, but now I'm found
Was blind, but now I see
Was blind, but now I see



Sublime Gracia

Sublime gracia, dulce son, a un infeliz salvó;
perdido andaba y me halló, su luz me rescató.

La gracia me enseñó a vencer, mis dudas ahuyentó.
¡Qué gozo siento en mi ser! Mi vida sí cambió.

Peligros, luchas y aflicción los he tenido aquí;
la gracia siempre me libró y me guiará feliz.

Y cuando esté por siglos mil brillando como el sol,
yo cantaré por siempre allí la historia de su amor.

domingo, 12 de julio de 2015

Una nueva forma de ver las cosas


Romanos 4:1-5 (Biblia Expandida de Fe)

1 ¿Y desde el punto de vista humano qué diremos que halló Abraham, nuestro antepasado y padre según la carne?
2 Si él hubiera sido justificado (declarado inocente y hecho justo) por las obras tendría de qué enorgullecerse y jactarse, pero no delante de Dios.
3 Porque, ¿qué dice la Escritura?: Abraham le creyó a Dios y esto le fue atribuido, imputado y tomado en cuenta como justicia (fue declarado inocente y hecho justo).
4 Ahora bien, al que trabaja no se le paga el salario como un regalo, sino como una obligación que se le debe, es decir, no se le reconoce como gracia sino como deuda.
5 En cambio, al que no hace nada, sino que cree en aquel que justifica (declara inocente y hace justo) al impío, se le tiene en cuenta la fe para su justificación (ser declarado inocente y hecho justo).


En este pasaje encontramos una gran realidad en cuanto a la gracia de Dios y es que es gratis.

Pablo pregunta: "¿Que consiguió Abraham con la carne o esfuerzos humanos?"

La Biblia The Message (El Mensaje) lo pone así: "Entonces, ¿cómo encajamos lo que conocemos de Abraham, nuestro primer padre en la fe, en esta nueva forma de ver las cosas?"

El hombre esta acostumbrado a conseguir las cosas por sus propios esfuerzos; inclusive la salvación la intentan obtener por un sistema de obras a través de la ley o las buenas acciones.

Pero que nos muestra Abraham con esta "nueva forma de ver las cosas."

Si él se hubiera justificado ante Dios por su propio esfuerzo, hubiera conseguido la salvación por sus propios méritos y podría jactarse de haberlo logrado por si mismo.

En Efesios 2:9 dice: "No por obras para que nadie se gloríe."

En la parábola del fariseo y el publicano vemos:


Lucas 18:9-14
9 A unos que confiaban en sí mismos como justos, y menospreciaban a los otros, dijo también esta parábola:
10 Dos hombres subieron al templo a orar: uno era fariseo, y el otro publicano.
11 El fariseo, puesto en pie, oraba consigo mismo de esta manera: Dios, te doy gracias porque no soy como los otros hombres, ladrones, injustos, adúlteros, ni aun como este publicano;
12 ayuno dos veces a la semana, doy diezmos de todo lo que gano.
13 Mas el publicano, estando lejos, no quería ni aun alzar los ojos al cielo, sino que se golpeaba el pecho, diciendo: Dios, sé propicio a mí, pecador.
14 Os digo que éste descendió a su casa justificado antes que el otro; porque cualquiera que se enaltece, será humillado; y el que se humilla será enaltecido.

El fariseo pensaba que el cumplimiento de la ley y sus propios esfuerzos le darían los méritos necesarios para ser justificado; pero el que fue justificado fue el publicano que no se acercó en sus propios méritos sino en la justificación que solo Dios puede dar.

No depende de nosotros sino de Dios.

Que dice la Biblia: "Abraham creyó a Dios y le fue contado por justicia."

Luego nos da una analogía del trabajo; ninguno de los que trabajamos lo hacemos gratis, esperamos recibir el sueldo pactado con el empleador.

Si la salvación fuera por nuestras obras entonces lo que recibiríamos es un pago de Dios por nuestras buenas acciones; y si pudiéramos pagar por nuestra salvación, ¿por qué murió Cristo?

Ya no sería salvación por gracia sino salvación por deuda.

El versículo 5 dice: "En cambio, al que no hace nada, sino que cree en aquel que justifica (declara inocente y hace justo) al impío, se le tiene en cuenta la fe para su justificación (ser declarado inocente y hecho justo)."

En esta nueva forma de ver las cosas que nos muestra Abraham, no tenemos que hacer nada para ser justificado; no tenemos que cumplir la ley ni seguir un sistema de obras para ser justificados, lo único que tenemos que hacer es lo que hizo Abraham, sencillamente creerle a Dios.

Nuestras acciones no nos dan mérito ante Dios, lo que nos da mérito es la fe en la obra completa de Cristo Jesús. 




sábado, 11 de julio de 2015

Estoy Desnudo


Filipenses 3:3-7
3 Porque nosotros somos la circuncisión, los que en espíritu servimos a Dios y nos gloriamos en Cristo Jesús, no teniendo confianza en la carne.
4 Aunque yo tengo también de qué confiar en la carne. Si alguno piensa que tiene de qué confiar en la carne, yo más:
5 circuncidado al octavo día, del linaje de Israel, de la tribu de Benjamín, hebreo de hebreos; en cuanto a la ley, fariseo;
6 en cuanto a celo, perseguidor de la iglesia; en cuanto a la justicia que es en la ley, irreprensible.
7 Pero cuantas cosas eran para mí ganancia, las he estimado como pérdida por amor de Cristo.
8 Y ciertamente, aun estimo todas las cosas como pérdida por la excelencia del conocimiento de Cristo Jesús, mi Señor, por amor del cual lo he perdido todo, y lo tengo por basura, para ganar a Cristo,
9 y ser hallado en él, no teniendo mi propia justicia, que es por la ley, sino la que es por la fe de Cristo, la justicia que es de Dios por la fe;
10 a fin de conocerle, y el poder de su resurrección, y la participación de sus padecimientos, llegando a ser semejante a él en su muerte

Pablo tenia muchas cosas de que gloriarse, no solo su raza, su religión, su familia, su caminar intachable, cosas que aparentemente podían justificarlo ante Dios.

Pablo vivía en un sistema de obras por medio de las cuales intentaba agradar a Dios, pero como vemos eso lo tomó por basura a fin de conocer a Jesucristo.

Pablo tuvo que desnudarse de su propia justicia (que era por medio de sus obras) y vestirse de la justicia que viene por la fe de Jesucristo.

Efesios 2:8-9
8 Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios;
9 no por obras, para que nadie se gloríe.
  

Nosotros tampoco podemos acercarnos a Dios por medio de nuestras acciones, no somos salvos por medio de nuestras obras, sino por la gracia de Dios.

Debemos dejar de lado el sistema de obras en el que hemos vivido toda nuestra vida para alcanzar el cielo.

He escuchado gente que me dice: "Estoy trabajando para mi salvación"; siempre les pregunto: "Y, ¿cuándo te jubilas?"

Ellos piensan que por medio de sus obras y buenas acciones lograran la salvación deseada, pero no lo consiguen, pues no es un asunto de obras sino de fe en Jesucristo.

Debemos entender que no somos nosotros sino Dios por medio de la obra de Cristo en la cruz 

La salvación no depende de las cosas que haga el hombre, por muy buenas que sean, depende de la gracia de Dios que se manifestó por medio de la obra de Cristo en la cruz.

Así que desnudémonos de todas nuestras buenas obras y todo intento de agradar a Dios por medio de nuestras acciones y dependamos sencillamente de Dios, viniendo a Él por medio de la fe en Jesucristo.
.

viernes, 10 de julio de 2015

Gracia Extrema


Efesios 2:8-9
8 Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios;
9 no por obras, para que nadie se gloríe.

Durante años me la pase peleando contra la enseñanza de la gracia, no podía entender el hecho de que no tenía que hacer nada sino solamente creer.


Habiendo sido criado bajo el mensaje de fe, yo creía que mi fe, mi confesión, mis acciones correspondientes eran lo que me traería la respuesta de Dios.

Y si, funcionaba en cierta medida, pero me di cuenta de que estaba dependiendo de mi mismo más que de la obra terminada de Cristo Jesús en la cruz del calvario.

Ya no dependía tanto de lo que yo hiciese sino de la obra de Cristo, fue un gran cambio en mi modo de pensar.

La gracia de Dios me había dejado totalmente desnudo, tuve que despojarme de todas mis obras, que en si no eran malas pero eran basadas en mi propio esfuerzo, y empezar a depender totalmente de Cristo.

Esto es lo que hace la gracia extrema, ya no depender de ti sino de la obra de Cristo Jesús por ti.

En este blog iré colocando enseñanzas acerca de la gracia de Dios, no lo se todo pues todavía estoy aprendiendo, pero iré compartiendo lo que he aprendido.