miércoles, 21 de junio de 2017

Día 22 - 100 Días de Favor (Joseph Prince)

En este devocional Joseph Prince nos enseña a no depender de medios y trucos humanos para alcanzar el favoritismo de la gente sino de depender del favor de Dios


 DÍA 22
Desea el favor de Dios, no el favoritismo de las personas

Versículo de Hoy
Los patriarcas, movidos por envidia, vendieron a José para Egipto; pero Dios estaba con él, y le libró de todas sus tribulaciones, y le dio gracia y sabiduría delante de Faraón rey de Egipto, el cual lo puso por gobernador sobre Egipto y sobre toda su casa.
-Hechos 7: 9-10

Es importante que reconozcas que existe una diferencia significativa entre el favor inmerecido de Dios y el favoritismo de las personas. El favor inmerecido de Dios se basa enteramente en el mérito de Jesús, y nosotros lo recibimos a través de su obra consumada en la cruz. No hemos hecho nada para merecer su favor. Es completamente inmerecido. El favoritismo, sin embargo, huele a esfuerzo propio. Las personas que dependen del favoritismo para tener una promoción necesitan recurrir a la adulación, a la política, a las tácticas de manipulación, a las calumnias malvadas y a todo tipo de concesiones sólo para conseguir lo que quieren. Ellas hacen todo lo posible para abrir puertas para sí mismas y, en ese proceso, se pierden.

¡No necesitas depender del favoritismo para mantener las oportunidades abiertas para ti cuando tienes el favor inmerecido de Dios!

Dios tiene un camino mayor y mejor para ti. Ver a Sus preciosos hijos rebajarse como los aduladores sólo para avanzar en la vida hiere el corazón de Dios. Si una puerta se cierra, que así sea. Cree con plena confianza que Dios tiene un camino mejor para ti. ¡No necesitas depender del favoritismo para mantener las oportunidades abiertas para ti cuando tienes el favor inmerecido de Dios!

Así era como José actuaba. Él dependía del Señor para tener éxito, y no del favoritismo, que habría hecho que hiciera concesiones en lo que se refería a sus convicciones. Cuando la mujer de Potifar intentó seducir a José para dormir con ella, José permaneció firme en el fundamento del favor inmerecido. Por cierto, creo que José enfrentó una tentación real. No olvides que Potifar era un oficial de alto rango, el capitán de la guardia y un hombre de posición, influencia y riqueza. Como un hombre del mundo, no se habría casado con una mujer fea por su belleza interior y ciertamente no se habría casado con alguien que parecía vieja. Él definitivamente habría elegido a una mujer joven y bella para ser su esposa, y ella probablemente era una de las mujeres más hermosas de aquella tierra.

Así que no hay duda de que fue una tentación real para José, ¡y por eso él tuvo que huir! Esa mujer no intentó con José sólo una vez. La Biblia nos dice que: "Hablando ella a José cada día, y no escuchándola él para acostarse al lado de ella, para estar con ella" (Génesis 39:10). Pero José la rechazó, diciendo: "No hay otro mayor que yo en esta casa, y ninguna cosa me ha reservado sino a ti, por cuanto tú eres su mujer; ¿cómo, pues, haría yo este grande mal, y pecaría contra Dios?" (Génesis 39:9).

De esas palabras, queda claro que José sabía cuál era la fuente de su éxito, favor y bendiciones. No veía el hecho de cederse a la mujer de Potifar como solamente una gran maldad y pecado contra Potifar, sino contra Dios también. Sabía que todas las bendiciones que había experimentado eran el resultado del favor del Señor sobre él. Sabía también que no había sido Potifar quien lo había promovido de la posición de esclavo subalterno a supervisor de todos sus bienes. ¡Había sido el Señor!

De la misma manera, en tu vida, debes saber y alegrarte porque el Señor es la fuente de tus bendiciones y éxito. No necesita recurrir al intento de ganar el favor de personas importantes. Es el favor del Señor sobre ti lo que te prepara para el reconocimiento, la promoción y el crecimiento.

Oración de hoy
Padre, te agradezco porque Tú estás por mí y no contra mí. Tú estás interesado en mí éxito y porque tu favor inmerecido está sobre mí, no necesito recurrir a la adulación, a la calumnia ni a ningún tipo de concesión sólo para tener éxito en mi vida. Hoy, descanso en tu amor y en tus buenos planes para estar apto para tener éxito.

Pensamiento de hoy
Sólo Dios es la fuente de mi éxito, favor y bendiciones.


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